5 pasos para construir un proceso de gestión de talento adecuado para ti

Un modelo de gestión del talento humano es algo más que un proceso de atracción y retención perfiles. Es estratégico, organizado y, cuando se realiza correctamente, se planifica de forma que prácticamente garantiza un resultado con empleados felices y duraderos en tu empresa.  

Cuando se implementa y ejecuta correctamente un modelo, tu personal crecerá junto con tu empresa y no solo eso, también deberías conseguir una menor rotación de personal y una mayor productividad, lo que supone un beneficio para tu negocio.  

Si quieres aprender a construir un buen proceso de gestión del talento, lee el siguiente artículo que tenemos para ti en Talent2Win.  

¿Qué es un proceso de gestión del talento? 

El proceso de gestión del talento es, en pocas palabras, el proceso de nutrir a tus empleados y mejorar su crecimiento desde antes de que los contrates. Por ejemplo, al seleccionar cuidadosamente a los empleados que crees que podrán crecer dentro de tu empresa y, con el tiempo, darles funciones más importantes, ya estarás dando el primer paso.  

Aunque un proceso de la gestión del talento debe ser continuo, hay algunos pasos claros que seguir. Estos pasos acaban volviendo al punto de partida a medida que tus empleados son ascendidos, se retiran o cambian a otro puesto de trabajo. Considera que, aunque esto último debería ser mínimo si el proceso se hace correctamente, siempre habrán empleados que se marchen por cualquier motivo.  

Te invitamos a seguir los siguientes pasos para perfeccionar tu proceso de gestión del talento.  

Primer paso: identifica y planifica 

Antes de comenzar la inevitable aventura de la estrategia de adquisición de talento que has elegido, debes identificar primero el puesto que se necesita cubrir. Estudia las funciones que esperas que desempeñe el candidato y futuro miembro de tu equipo. Para ello, debes evaluar tu plan de personal. 

Tu plan de personal debe ayudarte a identificar las lagunas existentes en las habilidades de tus empleados y observar si determinados miembros están haciendo malabares con demasiadas tareas y se beneficiarían de una redistribución de responsabilidades.  

Una vez que hayas identificado las tareas que se requieren del próximo rol, puedes empezar a crear una descripción del puesto. Dedica un poco de tiempo a elaborar una descripción que creas que replicará con precisión el tono de tu lugar de trabajo, así como el tipo de empleado que crees que prosperaría en la oficina y seguiría tu cultura organizacional. 

Al fin y al cabo, está demostrado que encontrar empleados que encajen con la cultura de tu oficina es uno de los mejores indicadores de éxito de un candidato (si se toma en cuenta el éxito en términos de satisfacción laboral, compromiso y duración en el puesto).  

Segundo paso: Atraer el talento  

Una vez que hayas decidido la función y las responsabilidades que hay que atender, es el momento de empezar a buscar a la persona perfecta para satisfacerlas. Debes empezar por evaluar primero si el puesto que se busca cubrir puede lograrse mediante una promoción interna. Si has estado trabajando en la creación de un canal de sucesión, es posible que ya tengas a alguien listo para ocupar el puesto desde dentro de tu organización. Si no es así, tendrás que buscar el talento externamente.  

Puedes abordar la tarea de una búsqueda externa con un enfoque triple:  

• Ofrece a tus empleados una bonificación por recomendaciones. Si recomiendan a alguien que finalmente acaba siendo contratado, ellos recibirán una bonificación. Este es un gran método, ya que sugiere que el proceso puede ser más suave de lo que sería con otro candidato, y puede ahorrarte dinero.  
• Pon el anuncio en sitios de búsqueda de empleo como Indeed, LinkedIn Jobs, Monster, etc. Esto le dará una gran visibilidad a tu convocatoria y atraerá a muchos candidatos. La desventaja será que la cantidad no siempre significa calidad.  
• Anuncia el puesto de trabajo en tus redes sociales. Si ya has invertido tiempo y esfuerzo en la marca de tu empresa, esto debería ser pan comido. Si no es así, es posible que la búsqueda no tenga tanto éxito. No obstante, en cualquier caso, anunciar el puesto de esta manera probablemente te hará llegar a personas que ya están familiarizadas con tu marca.  

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Tercer paso: El proceso de selección 

Si ya tienes un gran grupo de candidatos, puedes empezar a separar los buenos de los malos a través de una serie de entrevistas y pruebas con el fin de encontrar a los mejores para el puesto. La mejor manera de hacerlo es tener un conjunto de puntos de referencia preestablecidos antes de comenzar las entrevistas. Estos puntos de referencia establecerán una comprensión concreta de quién está calificado y quién no, y quién cumple los requisitos establecidos. 

Asimismo, dichos puntos te ayudarán a tener una verdadera comprensión de lo que se busca en un empleado y a no dejarse llevar por el encanto o carisma de una persona. Estos puntos de referencia predefinidos también te permitirán tomar decisiones basadas en el talento, y no en cualquier estereotipo preexistente de edad, raza o género, etc.   

Cuarto paso: Inversión en el empleado 

Una vez que hayas decidido quién es la persona ideal para la función, puedes comenzar el proceso de convertirla en el empleado “perfecto”. Para ello, puedes destacarte en tu proceso de onboarding al proporcionarles orientación y cualquier tipo de formación o entrenamiento necesario.  

También puedes invertir dinero en mejorar sus habilidades actuales para asegurarte de que saben todo lo que necesitarás que sepan cuando empiecen a trabajar. Al ayudar a tus empleados a mejorar, les demuestras que te preocupas por ellos y por su futuro en la empresa.  

Quinto paso: Retención y desarrollo continuo 

Ya tienes a tu nuevo empleado formado y listo para trabajar, pero recuerda que tu labor aún no ha terminado. A partir de aquí debes pensar en cómo retenerlos. Esto significa invertir tiempo y dinero en formación adicional, ofrecer ascensos donde y cuando corresponda, permitirles participar en la toma de decisiones y reconocer sus esfuerzos.  

Esta es la etapa del proceso que se aplica ampliamente a todo el personal, ya que ayudará a mantener la satisfacción en el trabajo y, a su vez, a mejorar la retención de los empleados.  

Asimismo, al proporcionar una forma de superarse a sí mismos a los miembros de tu equipo, les estás dando una razón para ser leales a tu empresa, lo que ayuda a garantizar un ciclo de vida de los empleados mucho más largo.  

En Talent2Win, nos esforzamos por alinear los objetivos de negocio de tu empresa con las mejores estrategias de Adquisición de Talento disponibles. Si quieres saber más sobre los servicios que ofrecemos, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.